El gran educador peruano Constantino Carvallo nos dejó hace una semana. Sin embargo, nos dejó su obra: los miles de alumnos que formó en sus treinta años como director y profesor del colegio "Los Reyes Rojos", y su extraordinario libro: "Diario Educar. Tribulaciones de un maestro desarmado" (2005). Este libro es una verdadera joyita que todo educador o persona interesada en este arte debería leer. Escrito a manera de diario, Constantino escribe anotaciones donde reflexiona sobre su labor de profesor y sus triunfos y fracasos (o incertidumbres). Lo maravilloso de esto es que cada fragmento está lleno de tal sabiduría, lucidez, amor, idealismo y pasión por su oficio que terminan por conmovernos. "Diario Educar" derrocha tal sabiduría y amor que hay que leerlo de fragmento en fragmento -tal como si fuesen versículos de la biblia- porque cada uno de estos te deja perplejo y admirado... Cito un fragmento: "...Los maestros fracasan porque no aman a sus alumnos, no en el fondo callado de sus almas. Y el oficio desgasta y cansa como ningún otro porque alma y cuerpo se entregan sin tregua al cuidado atento del prójimo, a la generosidad multiplicada, al combate gigantesco con uno mismo para entregar siempre lo mejor."...¡Constantino, descansa en paz!martes, 26 de agosto de 2008
"Diario Educar" de Constantino Carvallo
El gran educador peruano Constantino Carvallo nos dejó hace una semana. Sin embargo, nos dejó su obra: los miles de alumnos que formó en sus treinta años como director y profesor del colegio "Los Reyes Rojos", y su extraordinario libro: "Diario Educar. Tribulaciones de un maestro desarmado" (2005). Este libro es una verdadera joyita que todo educador o persona interesada en este arte debería leer. Escrito a manera de diario, Constantino escribe anotaciones donde reflexiona sobre su labor de profesor y sus triunfos y fracasos (o incertidumbres). Lo maravilloso de esto es que cada fragmento está lleno de tal sabiduría, lucidez, amor, idealismo y pasión por su oficio que terminan por conmovernos. "Diario Educar" derrocha tal sabiduría y amor que hay que leerlo de fragmento en fragmento -tal como si fuesen versículos de la biblia- porque cada uno de estos te deja perplejo y admirado... Cito un fragmento: "...Los maestros fracasan porque no aman a sus alumnos, no en el fondo callado de sus almas. Y el oficio desgasta y cansa como ningún otro porque alma y cuerpo se entregan sin tregua al cuidado atento del prójimo, a la generosidad multiplicada, al combate gigantesco con uno mismo para entregar siempre lo mejor."...¡Constantino, descansa en paz!
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