sábado, 28 de mayo de 2011

Libros


En estos meses he leído libros que no me ha provocado reseñar como Frankenstein (1818), de la inglesa Mary Shelley, porque no sería justo hacer una opinión sobre un libro en versión abreviada. Además, hay otros libros que he dejado a medias, no porque sean malos sino que por alguna extraña razón los abandoné.Incluso me atrevería adecir que son muy buenos libros, al menos Dublineses, del irlandés James Joyce, que dejé casi a la mitad pero que me dejó un par de cuentos buenos que ahora el título no recuerdo.Recuerdo,también, haber comenzado un libro de cuentos del escritor peruano-alemán José Adolph, Diario del sótano, que me dejó gratamente sorprendido,pero que tampoco pude culminar.

Son, pues, caminos extraños los que nos hacen acabar o dejar un libro y muchas veces no tiene que ver con la calidad del ejemplar,sino con el estado de ánimo impredecible del lector, o sea usted y yo.

Posdata: Aprovecho también para darle mi despedida al fallecido escritor peruano Carlos Eduardo Zavaleta (1928-2011), a quien tuve el gusto de conocer pues fue mi profesor en San Marcos. Recuerdo que a pesar de su avanzada edad,era un hombre lúcido y lleno de proyectos. ¡¡¡Que en paz descanse, profesor!!!. El mejor homenaje que le podemos hacer es leer sus libros. Dicen que los mejores son El Cristo Villenas, Pálido pero sereno ,entre otras.

No hay comentarios: