En el 2009, se publica el libro Open. Memorias, el cual es una
autobiografía del ex tenista estadounidense Andre Agassi (1970), ganador de 8 Grand Slams y
medalla de oro individual en los Juegos Olímpicos de Atlanta 1996. Aunque el
nombre de Andre Agassi sale en la portada, el verdadero autor del libro es
J.R. Moehringer, un escritor y periodista ganador del premio Pulitzer, quien se
mudó a Las Vegas, Nevada, y durante un año se reunió a diario con Agassi y lo
entrevistó a profundidad; luego de
grabadas las conversaciones, les dio forma en un ameno y profundo relato.
Open.Memorias se inicia antes
del penúltimo partido en la carrera de Agassi, en el 2006, en el Open de
Estados Unidos, frente al chipriota Marco Baghdatis, por la segunda ronda del
torneo. Ya en ese entonces, Agassi contaba con 36 años y sufría de dolores
intensos en la espalda. Debido a esto, le aplicaban inyecciones de cortisona
para aplacar el dolor. Gracias a esto, Agassi llega a salir a la pista y
realiza un largo y épico partido en el que termina derrotando a Baghdatis. Ya
desde la primera página, Agassi nos confiesa un gran e inesperado secreto: “Juego
al tenis para ganarme la vida, aunque odio el tenis, lo detesto con una oscura
y secreta pasión, y siempre lo he detestado”.
Luego, la historia se remonta a los primeros
años de infancia de Agassi. A cómo su padre, un hombre autoritario y frío, hizo
de él una máquina del tenis desde que era un crío de 3 o 4 años. De cómo su
padre, en La Vegas, Nevada, construyó una cancha de tesis en el patio de su
casa (y una máquina lanza pelotas llamada El Dragón) e hizo practicar a Agassi y sus hermanos mayores para que algún
día sean tenistas profesionales y futuros campeones. Por supuesto, solo el
pequeño Agassi logró el gran sueño de su padre, pero dentro del frágil niño se
incubó una relación de amor y odio con el tenis, ya que fue una pasión que no
nació de él, sino que le fue impuesta. Más aún, si perdía en algún partido
amateur, no solo tenía que aguantar su frustración, sino también la cólera y las
palabras duras de su padre. Fue también debido a su progenitor, que terminó, a
los 12 años, dejando Las Vegas para viajar a la Florida e incorporarse a la
escuela de tenis de Nick Bolletieri, la cual parecía un cuartel militar a la que
estuvo confinado varios años.
Este libro, muy bien escrito y narrado,
cuenta al detalle la carrera de Agassi como tenista, sus primeros triunfos y
derrotas, sus épocas gloriosas y sus etapas de fracaso, sus victorias en los Grand Slams y torneos importantes del
circuito de tenis, sus partidos históricos, sus rivalidades con Pete Sampras,
Thomas Muster, Boris Becker, Jim Courier, Michael Chang, entre otros. Además, y
sobre todo, Open es un viaje a la
mente de Agassi, a sus conflictos interiores, a su amor y odio por el tenis, a
sus dudas y contradicciones, a su miedo a fracasar, al dolor de perder, a la
búsqueda del balance para encontrar su mejor tenis, a sus amores y pasiones.
Cuando uno termina de leer este libro,
siente que ha conocido al tenista, siente que Andre Agassi ha dejado de ser ese
ídolo inalcanzable y se ha convertido en un humano como cualquiera de
nosotros, con dudas y temores; que muchas veces pensó en abandonar su carrera
tenística, que muchas veces se sintió vacío y desolado, que muchas veces
cuestionó su talento, pero que descubrió –como todo en la vida– que a pesar
de que nada es perfecto, el éxito consiste en persistir, en aguantar, en dejar lo
mejor de uno en cada cosa que hagamos. Y eso lo hace a Agassi más admirable.
Pese a que el epílogo es la parte más
débil del libro, ya que parece un publirreportaje sobre la fundación de Agassi que ayuda a niños
(y que pudo obviarse), Open es
realmente una autobiografía conmovedora
y aleccionadora, cuya lectura resulta muy amena, y que no tiene nada que envidiar
a las mejores novelas por su prosa y profundidad psicológica. Muy recomendable.
No hay comentarios:
Publicar un comentario